Anoche soñé que me robaban los sueños...
En una casa que no era la mía,pude recordar algo que había leído en algún lugar,
 “La puerta mejor cerrada, es la que se puede dejar abierta” 
...es posible que esa fuera mi única certeza.
 Durante largo rato me atrincheré, pero mis defensas basadas en sentimientos no correspondidos, pronto fueron rindiéndose uno a uno. 
Me di cuenta de que yo era mi propio enemigo y decidí mostrar la bandera blanca, para acercarme a mí misma y comenzar el diálogo con mi corazón  herido...
Mi carro de combate, tenía las aristas desiguales y ante esas premisas difícilmente iba a poder seguir avanzando.
 Me detuve y paso a paso comencé a dibujar la rueda de mi vida, proyectando mi situación actual en sus diferentes áreas, a partir de un punto central construí radios de colores, a cada radio le puse un nombre empece por salud, luego amigos, familia,estudios,desarrollo personal...
 a cada una de ellas le fui dando una nota del 0 al 10 marcando con una cruz mi puntuación, uní los puntos y me quedé contemplando el dibujo que tenía ante mí y así de forma sencilla pude observar que aspectos de mi vida, precisaban de una mayor atención por mi parte.
Trabajare en ello,ojala lo logre.